Mixology
La primera cosa que debes prometerte a ti mismo es que no te vas a pasar de tragos. Es tu primera cita, quieres tener una conversación amena y coherente, por ende es tu misión mantenerte sobrio.
El bartender es tu mejor amigo en esta situación. A menos que el bartender esté interesado de alguna manera en ti, ten por seguro que siempre buscará hacer el momento mucho más llevadero para ambos, bien sea siendo simpático, ofreciéndoles el mejor servicio e incluso creando el ambiente propicio para una buena conversación. Recuerda tratar con respeto a esa persona detrás de la barra pues podría ser el elemento sorpresa que haga de tu cita un éxito o un completo desastre.
Hablando de la música, no existe mejor lugar para conocerse que en la pista de baile. Anímate a invitar a tu cita a bailar y así poder determinar qué tan bueno(a) es bailando. Quizás y hasta descubras algo de sus gustos en música, quién sabe.
Bebe lo que tú quieras, pero ya que estás en medio de una nueva experiencia, ¿por qué no experimentar con un trago nuevo? Ordena un Martini de manzana o algo exótico. Una cerveza o una copa de vino siempre son elecciones seguras, pero también son elecciones poco interesantes.
No te encuentres en un bar en el que eres cliente frecuente. Este puede ser un error de proporciones descomunales. Son miles las cosas que pueden suceder, desde que tu cita se sienta confundido por tu nivel de amistad con el bartender, hasta que la cita salga mal y vuelvas a encontrártelo(a) ahí, o que incluso te encuentres a un ex, son cosas que podrían arruinar por completo tu velada. Elige un lugar nuevo, con comida deliciosa, que no sea muy escandaloso y así abra paso a una buena conversación.
