Shark Tank México

Unos emprendedores presentaron un sistema de granjas de hidroponias verticales sin desperdicios de agua que pueden funcionar los 365 días del año y que trabajan de manera automatizada. Amaury se fascina con la idea, considera que esta modalidad es clave para la alimentación del futuro, opina que este es el momento de invertir en un negocio propio de esta manera. Marcus ofrece lo mismo que Amaury pero solicita menor porcentaje de inversión. Alejandra se muestra interesada para el futuro y Amaury decide invitarla a la oferta como advisor y baja su porcentaje al mismo de Marcus. 

Alejandra sorprendida acepta trabajar con Amaury en este proyecto, pues él afirma que ella sería una pieza clave y los emprendedores terminan por elegir la oferta de Amaury y Ale. ¡Dos tiburones valíosísimos!

Una gran idea invade al tanque: un sustituto en grageas muy pequeñas de la pasta de dientes. ¡Basta de desperdiciar la crema! Un hombre y una mujer exponen su marca, el sustituto maravilloso de la crema convencional. El producto sorprende a los tiburones, pero todos coinciden en que la valuación es exagerada, así que a pesar de que comparten algunos consejos y alaban a la marca, deciden quedarse sin invertir en ella de momento. Amaury expresa que desea contactarlos a futuro porque le parece una gran idea y en este instante le genera conflicto de intereses.

Un par de amigos presenta una idea de negocios innovadora: un sistema de tecnología especializado para inspectores de aviones que funciona con un drone y es una gran herramienta para las aerolíneas. A Alejandra le encanta la idea de que los emprendedores hayan identificado y ocupado de este nicho de mercado. Amaury se queda con la sensación de que no explicaron todo sobre el negocio y de que creen que los tiburones no son los adecuados para ayudarlos. Se van sin inversión. 

Una idea interestelar aparece en el tanque, una empresa que ha desarrollado una tecnología de materiales a base de almidón de maíz, termoformables, comestibles y desintegrables (platos, vasos), sin gluten, grasa y bajos en azúcar. Los tiburones prueban el producto y les parece sabroso. El emprendedor cuenta su historia y no logra convencer a los sharks, porque además la valuación es elevada. Mientras tanto Marcus considera que es una empresa en pleno crecimiento, así que le ofrece una mentoría para ayudarlo a comercializar. ¡Un buen trato!